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La historia de: Yaneth - Inmigrante en busca de una oportunidad

En CIMUJER abrimos este nuevo espacio para compartir el proceso migratorio de mujeres de nuestra comunidad, de Venezuela, Colombia, Perú y de muchos otros países de Latinoamérica. Conocerás de trámites, relatos y vivencias por las que pasamos al decidir dejar nuestros países de origen.

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María Verónica Bastardo y Yaneth Fdez.

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mujer con una maleta representando la migración femenina
mujer con una maleta representando la migración femenina

La historia detrás de la trayectoria migratoria de Yaneth

Hoy les contamos la historia de Yaneth, una mujer de 41 años, colombiana, trabajadora y devota a Dios. Yaneth fue muy amable y nos compartió su historia migratoria, con el fin de inspirar e informar a otras mujeres migrantes.

Sus inicios: ¿Cómo decide viajar a España?


Una mujer devota. Siempre lleva el evangelio, a donde quiera que va, tenía la promesa a Dios de salir a las naciones, de recorrer el mundo “ Eso me ilusionó”. Un día, esperanzador, soleado, sentía que la oportunidad le llegaría en cualquier momento.

Recibió la llamada de un amigo, un conocido que vivía en España, ella le preguntó: “¿Me ayudarías en algo? quiero emigrar…” y sin dudarlo su amigo le dijo: “¡Claro que sí!” Tanto fue la emoción de Yaneth que le dijo: “¡Lo hago ya!”. Pero, un choque de la realidad, Yaneth no tenía ni un céntimo, todo lo que tenía eran unas cuentas largas en los bancos, debido a la caída de su negocio de 20 años.

Empezó a buscar dinero prestado con un amigo, vendió lo que tenía: el coche, herramientas, entre otros. Compraron tickets de viaje para febrero del 2020. Al llegar a Madrid, pensaron que encontrarián un tren a Alicante para luego tomar un autobús hacía Torrevieja, ciudad a donde debían llegar.

Pero para su sorpresa, cuando quisieron comprar el ticket, el chico de la ventanilla le dijo que no había pasajes; ambos exclamaron “¡¿Cómo?!” el chico con mucha impresión por sus reacciones les comenta que el próximo viaje saldría en tres días, todo estaba agotado. Pasmados y un poco asustados Yaneth y su esposo no sabían qué hacer pero, un milagro pasó, justo cuando ya iban a irse el chico los llama y les dice que han cancelado dos puestos, y siguieron su viaje. Yaneth afirma que fue Dios quien les regaló ese gran milagro. Viajaron de Madrid a Alicante, en primera clase, por 40€ . Un viaje con una vista preciosa, les dieron comida y disfrutaron todo el trayecto.

Al llegar a Torrevieja, donde una familia los iba acoger, les dieron un colchón para dormir en el balcón, era mediados de invierno, hacía mucho frío y se resfriaron. Yaneth le oró a Dios por un piso, ya que es muy complicado conseguir uno siendo inmigrante recién llegado. Incluso la señora de la familia les decía que debían buscar un piso, pero que se le iba a hacer difícil porque no tenían dinero.

Yaneth se aferró a Dios, que él todo lo puede. A los 15 días de estar en Alicante, llegó la pandemia y ellos buscando trabajo, piso y un futuro próspero. A los 20 días un conocido de la familia llamó y dijo que posiblemente había algo para Yaneth y su esposo.

Llamaron, hicieron cita y cuando llegaron al piso, la casera era rusa. No sabía ni una palabra en español. El piso estaba para estrenar y cuándo lo vieron… Estaban atónitos; pensaban que iba a ser muy caro. Era un estudio, una habitación, sala, cocina y un hermoso patio. Les informan que el costo era de 250€ más un mes de fianza.

La casera, a través de traductor les pregunta si tienen 540€ y sus pasaportes, les tomó fotos y les entregó las llaves. Yaneth, simplemente, no podía creer lo que estaba viviendo, era mucho mejor de lo que había pedido en sus oraciones, ahí estuvieron por dos años.

Actualmente, no les ha sido fácil conseguir trabajo, sus empleos son esporádicos y tener a sus hijos tan lejos… afectó mucho a Yaneth, vivió una depresión muy fuerte; pero aun así, le agradece a Dios que las veces que deseaba regresar su esposo le daba mucha fortaleza.

Yaneth siempre recomienda que sí migran, que no lo hagan solas; que como mínimo la pareja, los hijos, alguien con quién poder tomar la mano y abrazar para dejar la espalda llena de lágrimas cuando no podemos contenerlas.

Justo esta semana Yaneth se va de Torrevieja, está en la búsqueda para establecerse en otra ciudad, una que promete empleo.

“Confío en DIOS, cómo siempre. Él está caminando con nosotros. Mi consejo es que si ponen al señor como principal en sus vidas, todo se puede”.


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